viernes, 14 de octubre de 2011

MARCA ESPAÑA


Si de algo puede presumir España, es de haber conseguido situarse durante años en el centro de todas las miradas, y no sólo como destino turístico. Hoy la pérdida de influencia de nuestro país hace necesario recuperar nuestra posición hegemónica, para volver a estar entre los líderes de Europa y con personas superespecializadas, en nuevas materias.

Nuestro país debe defender su identidad, que implica nuestro patrimonio cultural, la capacidad para innovar y el capital intelectual, por encima de todo.

Los Bancos chinos se instalan en las mejores zonas,  con competencia horaria, y alardean que su dinero “no es de mentira”. Los pueblos turísticos costeros están tomados por rusos y alemanes o de Japoneses que han comprado Zahara de los Atunes, para hacerse con este preciado pescado. Nuestra economía está colonizada.

DESCUBRIMOS AMÉRICA

Nuestro país tiene que volver a ser sinónimo de TALENTO, derrochado en forma del patrimonio y legado cultural que hemos heredado. De EMPRENDIMIENTO, en su día representados por los grandes conquistadores o el mismo Cristóbal Colón, que descrubrió América.

Dicen que nuestra historia comenzó así, con una manzana ...
Debemos fomentar la creación de empleo para dar seguridad a los cinco de millones de personas que están desempleadas y que no tengan que emigrar a otros lugares del mundo. Dar facilidades para INNOVAR y tener la mente abierta a nuevas ideas… ¿No les parece fantástico ser emprendedor a los 50 años? El genio creador es el que nos sacará adelante…

Evidentemente, tendremos que apretarnos el cinturón en términos económicos, pero al tiempo ser fecundos en ideas novedosas, a todos los niveles, si queremos llegar a los niveles de prosperidad que necesitamos. No hacen falta respuestas de gran magnitud, ni de índole sobrenatural. Basta con medidas simples pero eficaces.

FECUNDOS EN IDEAS

En esta época global, de adoctrinamiento de masas, de hundimiento del capitalismo financiero, la gran respuesta está en nosotros, en la SOCIEDAD CIVIL. Somos nosotros, tú y yo, los que hemos de correr con el encargo de hacer “Marca España”.

Para prosperar hemos de SALIR DE ESE ANQUILOSAMIENTO MENTAL y de la angustia global. Para volver a producir, en este siglo de la comunicación y las nuevas tecnologías, hemos de generar confianza en el campo de las ideas. Los arados, se llaman ordenadores y las cosechas, redes sociales… y el talento está en nosotros.

... El hombre de la manzana revolucionó el siglo XXI
Los jóvenes han dejado los libros para unirse a los tablets… Y nuestro futuro estará enmarcado en la cantidad de “Steve Jobs” que España sea capaz de potenciar. Los genios visionarios se salen de la norma y , en la mayoría de los casos, no son comprendidos… Pero ya no son tiempos de mediocridad, sino de SOBRESALIR y tomar decisiones sin vuelta atrás.

Sara Dobarro
Director de Quedigo.com

3 comentarios:

Miguel Angel Martin dijo...

Está bien y estoy de acuerdo con la esencia de la entrada, pero no en la creencia de que somos el ombligo del mundo. Llegamos los primeros a América, pero arrasamos civilizaciones milenarias para imponer nuestras creencias y costumbres. Al menos, los japoneses y los chinos no nos imponen (hasta ahora) las suyas.

Estamos en un mundo globalizado y el concepto nación queda diluido en el concepto mundo. España forma parte de la Unión Europea y las decisiones (e indecisiones) de Bruselas cada vez irán teniendo mayor peso (como ya se ha demostrado). Y el concepto nación debe separarse del conecepto estado; mientras uno es un espacio mental y emocional el otro es un concepto territorial. España es una estado de naciones igual que Europa es otra suma de naciones.

El talento y la innovación ya existen y surgen a diario. Pero hay que apoyarlo y financiarlo. Y el dinero difícilmente fluye de manos limpias. Quienes crearon y facilitaron el dinero fácil solo edificaron un gigante con pies de barro, un castillo de naipes que cayó al primer soplido de viento.

En definitiva, apoyemos las buenas ideas, vengan de donde vengan, pero abandonemos el obsoleto objetivo de volver a ser un imperio. No es el camino.

Sara dijo...

Querido amigo Miguel Ángel, bien es cierto lo que dices, como también lo es que unas mismas palabras pueden generar diferentes ideas.

No pretendía trasladar con mi artículo la idea de Imperialismo, sino la imperiosa necesidad -y valga el juego de palabras- de poner en valor todo nuestro talento, demostrado a lo largo de los siglos.

¿No crees que tus ideas merecerían ser escuchadas?... Yo lo hago y te aprecio, pero no tengo el poder de proporcionarte financiación. Estamos en el mundo dónde sigue imperando "poderosa caballero es don dinero" ;-)))

Gracias por tu comentario.

Miguel Angel Martin dijo...

Siempre tropezamos en la misma piedra, querida Sara. Sigue siendo un cabellero excesivamente poderoso.